
A la hora de preparar un viaje nos encontramos ante la disyuntiva de reservar con antelación o esperar algún chollo de última hora. Vamos a intentar ayudaros, basándonos en nuestra experiencia, a tomar la decisión correcta, por supuesto siempre pensando en nosotros: familias numerosas…
Somos muchos, generalmente viajamos con niños y hay que tener claro que el número de hoteles adaptados a nuestras necesidades es muy reducido, y el número de habitaciones habilitadas para familias numerosas en cada uno de ellos es limitado. En el caso de hoteles y apartamentos planear la reserva a largo plazo supone que podemos elegir cualquiera de esos establecimientos ya que todos están disponibles. Esperar a última hora implica reservar con lo que quede disponible que nunca es lo más apropiado ni lo más barato. Por lo tanto en este caso lo más aconsejable es aprovechar las reservas de Early Booking / Venta Anticipada estando siempre muy atentos a las condiciones en caso de cancelación y contratar un seguro adecuado.
En el caso de los vuelos está aún más claro que no hemos de dejar la reserva para última hora ya que las tarifas aéreas van aumentando a medida que se acerca la fecha de salida. Hace unos años, cuando lo habitual era viajar en vuelos charter, sí que era posible encontrar buenos precios de última hora en ofertas que lanzaban las mayoristas para completar las plazas. Hoy en día todo se realiza en línea regular o low cost y esperar más significa pagar más.
En cruceros, si ya es difícil contratar una cabina quíntuple o de más capacidad, dejarlo para última hora es misión imposible. Es un producto caro en si mismo, así que es fundamental aprovechar la venta anticipada e incluso reservar de un año para otro para obtener los mayores descuentos.
Un destino donde sí sería posible encontrar mejor precio de última hora es el Caribe debido a que los vuelos siguen siendo chárter en su mayoría y las mayoristas lanzan ofertas con grandes descuentos para niños, ahora bien, el número de hoteles donde cabemos 5 ó más personas es limitadísimo.
Queda claro que nuestra opción siempre sería reservar con la máxima antelación, siempre teniendo en cuenta que el viaje estandar de la familia numerosa se realiza en temporada alta, osea Semana Santa, verano y Navidad, cuando los precios por lo general son más altos.