No se muy bien por qué hemos tardado tanto tiempo en visitar Galicia.
Siempre lo hemos visto como un viaje de verano y en esta época parece que nos atraen cosas más «exóticas». Mover una familia numerosa para viajar no es tarea sencilla en muchos casos y reconozco que siempre nos ha vencido una cierta pereza a la hora de emprender este viaje.
Error.
Ha tenido que llegar esta desgracia llamada COVID-19 para obligarnos a viajar por España e invitarnos a redescubrir una tierra maravillosa en la que nos hemos sentido como en casa.
Galicia es para moverse, para familias numerosas activas. Nada de macro resorts turísticos ni hoteles todo incluido. En Galicia todo es sencillo, familiar. Para descansar tenemos otras opciones. Aquí venimos a recorrer el máximo posible de sus paradisíacas playas, subir a los infinitos miradores, empaparnos de olor a eucalipto y degustar toda su variada gastronomía.
Un viaje sencillo de planificar para cualquier familia numerosa, bastante económico comparado con otras opciones veraniegas. Es cierto que este año está siendo raro raro, pero hemos encontrado alojamiento a un coste asequible en pleno final de julio. Y la comida yo diría que hasta nos ha parecido barata (acostumbrados a nuestros precios vascos)…
En nuestro caso como tenemos bastante distancia desde Euskadi hemos intentado abarcar lo máximo posible, empezando por Rías Altas y continuando por Rías Bajas.
¿Que cuáles son más bonitas?
No sabría decirlo, son diferentes. Quizá los pueblos de las bajas tienen más encanto pero los paisajes de las altas son abrumadores…
Siempre decimos lo mismo, no pretendemos hacer una guía turística, simplemente facilitar a las familias numerosas que nos seguís unas pautas para hacer más sencilla la preparación de vuestro viaje. Así que vamos al grano…y si reserváis a través de los nuestros enlaces, nos reporta unos pequeños ingresos que sirven para ir manteniendo este blog.
Alojamiento
Lógicamente para abarcar tanta superficie hay que alojarse al menos en dos zonas diferentes. Tal y como preparamos el itinerario nos parecía que la mejor opción para Rías Altas era dormir en Vivero y para Rías bajas en la zona de Portonovo y ya de vuelta pienso que fue un acierto.
Apartamentos Duerming sea view Viveiro. Espectacular. En primera línea de la Praia de Covas y con unas vistas fabulosas. Súper recomendable. Con garaje y un supermercado en el mismo edificio. Una maravilla poder dar paseos por la playa a primera hora mientras se «desperezan las fieras».
Los Apartamentos Duerming Sea View Viveiro tienen capacidad desde 4 y a 6 personas con 2 dormitorios dobles y un sofá cama en el salón comedor con capacidad para otras dos personas. Todas las habitaciones disponen de 2 televisiones LCD, baño completo, secador de pelo, cocina completamente amueblada, microondas, cafetera, menaje, lavadora, plancha, tabla de planchar y ropa de cama.
Apartamentos Duerming Bolera-Pico en Portonovo. Buena opción. No están al nivel de los de Viveiro pero es que es difícil. Son más sencillos y funcionales. Están situados en segunda línea frente a la playa de Baltar y el club náutico de Portonovo. Perfecto para los que desean un alojamiento tranquilo y cerca del mar. Tienen capacidad para entre 4 y 5 personas máximo y están equipados con dos dormitorios, cocina-salón, baño completo, lavadora, menaje básico de cocina, microondas, TV, cafetera, plancha, tabla de planchar, ropa de cama y toallas. Las instalaciones del alojamiento se completan con ascensor y parking privado en edificio cercano bajo petición y con coste extra.
Booking.comDía 1 Área de Estaca de Bares
Comenzamos la ruta en O Barqueiro, una pequeña aldea pesquera con mucho encanto.
O Barqueiro
El pueblo rezuma paz y tranquilidad y las vistas desde lo alto son maravillosas. Parece ser que su nombre se debe a un barquero que ayudaba a los transeúntes a cruzar el estuario del río Sor con su barca. Actualmente existen unos puentes cumpliendo dicha misión.
Muy cerca está la Praia de Arealonga, de 1.3 km de longitud de blanca y fina arena y aguas tranquilas.
Estaca de Bares
Continuamos hacia Estaca de Bares con su faro. Es el punto más septentrional de la Península Ibérica. Resulta curioso pensar que se encuentra 400 km más al norte que Nueva York.
Como en muchos miradores de Galicia las vistas son magníficas, en este caso de los acantilados.
Acantilados de Loiba
Siguiendo la excursión visitamos uno de los puntos más originales de la zona, los Acantilados de Loiba donde se encuentra el «banco más bonito del mundo«. El banco no tiene nada especial, pero las vistas que tenemos sentados en él…
Ya de vuelta a Viveiro subimos por un tortuoso camino al Mirador de San Roque, pensando que las vistas de la ría iban a ser interesantes, pero nuestras expectativas se ven ampliamente superadas. Encontramos una capilla del S XVI, un bonito hórreo, una cueva coronada por una cruz... Cuesta subir pero merece la pena.
Día 2 Playa de las Catedrales y Souto da Retorta
Playa de las Catedrales
Sin duda, uno de los alicientes de este viaje por las Rías Altas era poder visitar la Playa de las Catedrales, auténtica arquitectura natural. Resulta impresionante ver de cerca los arcos esculpidos por el aire y el mar durante miles de años.
La visita resulta sencilla, es muy recomendable acceder entre 2 horas antes y 2 horas después de la bajamar para verla en todo su esplendor. En verano y Semana Santa resulta resulta imprescindible reservar la visita de manera gratuita aquí. Está todo perfectamente indicado. Hay aparcamiento muy cerca del acceso y un sistema de pasarelas conecta las diferentes zonas. Una vez en la arena solo hay que dejarse llevar por la magia del lugar. Eso sí, no esperéis estar solos…
Souto da Retorta
Souto da Retorta nos encantó. Todo un descubrimiento, un bosque de eucalipto tan bucólico y encantador en el que parece que se haya parado el tiempo. Aquí encontramos algunos de los ejemplares más altos y de mayor envergadura de Europa como el famoso “avó” (abuelo), plantado hacia 1880, con más de 67 m de altura y 10,5 m de perímetro.
El eucalipto no es autóctono de Galicia si no que fue traído desde Australia en sl SXIX por un religioso gallego, adaptándose a la perfección al clima y terreno.
Entre Viveiro y Ribadeo hay otras visitas interesantes como los impresionantes arenales que encontramos en Foz, más de 15 km de playas espléndidas de fina y blanca arena. Nos llamó mucho la atención la cantidad de kilómetros de paseo peatonal que bordea las playas.
A 5 km de Foz está la catedral más antigua de las conservadas en España, la primera que se construyó en el sur de Europa: San Martiño de Mondoñedo del siglo VI.
Día 3 De Ortigueira a San Andrés de Teixidó
Comenzamos el día en Ortuigueira desde donde continuamos hacia el Cabo Ortegal perteneciente al municipio de Cariño, un peculiar pueblo con casas de colores colgadas en el acantilado.
Cabo Ortegal
Ortegal es el segundo cabo más septentrional de la península Ibérica solo superado por Estaca de Bares. Desde aquí las vistas son espectaculares y se puede observar una sucesión de acantilados de cientos metros de altitud donde rompen las olas de forma salvaje. Cabo Ortegal sirve de frontera entre el océano Atlántico y el mar Cantábrico.
El Cabo Ortegal hay un faro de unos 13 metros de altura y un aparcamiento pequeño con una capacidad para unos 15 coches.
Os recomendamos, una vez visitado el faro, dirigiros hacia el Miradoiro da Miranda. Cuesta bastante llegar por un camino muy estrecho y sinuoso pero las vistas que tenemos desde allí son un deleite para los sentidos.
En el mismo mirador hay unas mesas perfectas para un buen pic-nic antes de retomar la ruta.
Desde aquí nos dirigimos a los Acantilados de Vixia de Herbeira, Los más altos de la Europa Continental con 613 m de altitud sobre el nivel del mar. Una pena que una espera niebla nos quisiera acompañar en este tramo del viaje…Nos acercamos hasta la Garita de Herbeira, el mirador de los acantilados pero solo pudimos ver la nada…Así que rumbo al último punto del día, San Andrés de Teixidó.
San Andrés de Teixidó
Es el segundo santuario de Galicia después de Santiago de Compostela y está considerado como la meca de los gallegos. Se encuentra en un pequeño valle de la Sierra de Capelada sobre uno de los acantilados más altos de Europa. Sin duda es un lugar de lo más peculiar.
Cuenta la leyenda que San Andrés, uno de los doce apóstoles, llegó navegando hasta los acantilados de la zona en donde volcó su embarcación, quedando ésta convertida en una gran piedra que ahora tiene el nombre de «La barca de San Andrés». La leyenda dice que nadie le prestó ayuda, pero recibió de Dios la promesa de que tendría un santuario y una romería, a los que, vivos o muertos, acudirían todos los mortales.
Día 4 De camino a Rías Bajas con parada en A Coruña
Día de transición de una zona a otra. Nos desviamos un poco para aprovechar una parte del día en la animada A Coruña.
Al ir con niños, el aquarium nunca falla y este merece la pena. Súper precio para familias numerosas, todo hay que decirlo.
La impresionante Torre de Hércules es el símbolo de la ciudad. Construida y utilizada como faro por los romanos se vanagloria hoy en día de ser el faro en funcionamiento más antiguo del mundo.
Después un agradable paseo por la ciudad vieja con la Plaza María Pita como bandera y disfrutar de las famosas galerías del paseo marítimo de A marina.
Día 5 Ría de Arosa
Ya estamos en las Rías Bajas y hay que aprovechar el microclima que tiene esta zona en la que el sol luce como en el Mediterráneo.
Pobra do Caramiñal
Lo primero que hacemos es dirigirnos hacia Pobra do Caramiñal para subir desde allí al Mirador de A Curota, un inmejorable punto de vista de la ría de Arousa, sobre la sierra de Barbanza. La subida en coche está señalizada desde el pueblo. Arriba se ve desde Finisterre hasta las islas Cíes y la desembocadura del Miño en días claros. Y la Ría de Arousa prácticamente al completo.
Innumerables playas casi vírgenes salpican toda la costa y tenemos que elegir una para pasar la mañana. Vamos a la Praia do Vilar en el Parque Natural de Corrubedo, conocido por sus dunas. Es una playa con bastante oleaje pero con toda la esencia de las playas salvajes. Pasarelas de madera franquean el acceso a los arenales, todo está cuidado. El agua fresquita…
Isla de Arousa
Ya después de comer nos dirigimos hacia la Isla de Arousa pasando por Villagarcía y Vilanova. Esta isla es una auténtica joya contorneada por preciosas playas a cual más apetecible. Nos quedamos un rato en la Praia area da Secada desde donde, alquilando un velomar podemos acercarnos hasta las bateas fondeadas en la ría.
Cambados
Cambados es visita obligada, elegante y señorial. Declarada conjunto histórico Artístico en 2001 es un lugar repleto de historia con innumerables pazos y casas señoriales.
La plaza de Fefiñans, por ejemplo, es considerada por muchos como la segunda plaza más hermosa de Galicia tras la del Obradoiro en Santiago de Compostela. En esta plaza se ubica el pazo de Fefiñans, un precioso palacio del siglo XVI que alberga en la actualidad una de las más célebres bodegas de vino albariño.
O Grove y La Toja
Para finalizar este largo día no podíamos obviar la famosa Isla de la Toja, uno de los lugares más emblemáticos de todas las rías Bajas. En el pasado este lugar servía a los lugareños para pastorear a sus ganados. Al descubrirse las propiedades curativas y reparadoras de los fangos y las aguas medicinales de la isla de La Toja se convirtió en balneario que ganó fama rápidamente.
Hoy en día encontramos hoteles de lujo y el conocido Balneario de aguas termales que data de 1.840. No hay que pasar por alto la Casa de las Conchas cuyas paredes están forradas de conchas de Vieira.
Para llegar hasta la Isla hay que cruzar el puente que la conecta con la Península de O Grove, que se encuentra unida a tierra por la estrecha franja de arena de la Praia de A lanzada, una de las más conocidas y visitadas de Galicia con 2,5 km de longitud
Ahora bien, O Grove guarda preciosos secretos en forma de playas como la de Con Negro. Playas de arena fina y aguas cristalinas que bien merecen el nombre de el «Caribe Gallego«
Día 6 Santiago de Compostela
Poco se puede decir de Santiago de Compostela que no hayamos oído ya..Capital de Galicia a la que acuden miles de peregrinos año tras año. Fue declarada en 1985 Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco por ser un extraordinario conjunto de monumentos agrupados alrededor de la tumba de Santiago El Mayor, y destino de todas las rutas de la mayor peregrinación de la Cristiandad entre los siglos XI y XVIII, Santiago de Compostela es sin duda alguna uno de los más indiscutibles bienes patrimoniales de la Humanidad.
Y no le falta razón.
Es la joya de la Corona de Galicia, un conjunto arquitectónico que rezuma historia por todos sus poros, que te traslada al pasado. Una pena que las eternas obras de la Catedral no nos permitan ver despejada esta impresionante obra, la más sobresaliente del arte románico en España.
En fin, Santiago no hay que contarla, hay que vivirla.
Día 7 De Baiona a Tui
Una jornada muy interesante y diferente recorriendo el sur de Galicia hasta la frontera con Portugal.
Baiona
Comenzamos el día con una visita de Baiona, villa turística y marinera con mucho encanto. Baiona fue el primer puerto de Europa que recibió la noticia del Descubrimiento de América. El 1 de marzo de 1493, la Carabela Pinta atracó en estas aguas. Con la conmemoración del V Centenario del Descubrimiento se construyó una réplica de la embarcación que permanece amarrada, para los visitantes, en uno de los muelles.
Llama poderosamente la atención el Castillo de Monterreal, donde actualmente está ubicado el Parador Conde de Gondomar.
Tui
Continuamos viaje hacia A Guarda, en el extremo suroeste de Galicia, ya frontera natural con Portugal gracias al río Miño.
De A Guarda nos quedamos sin duda con el Monte Santa Trega, lugar de visita obligada por sus interesantes valores arqueológicos, religiosos y paisajísticos.
La subida es de pago pero realmente merece la pena. Antes de llegar a la cima nos encontramos con la Citania de Santa Trega, un yacimiento arqueológico de la cultura castrense que ocupa unas 20 has de superficie, de las cuales tan solo una pequeña parte está excavada, tiene sus orígenes documentados en el s. IV a. C.
Este castro, situado a 341 metros de altitud que llegó a contar con 5.000 habitantes, fue declarado Monumento Histórico Artístico Nacional en el año 1931 y también tiene la consideración de Bien de Interés Cultural.
El Monte Santa Trega se erige como un excelente mirador natural con unas magníficas vistas hacia el estuario del Miño, Portugal, valle de O Rosal y Océano Atlántico.
Bordeando la frontera hispano – portuguesa no dirigimos hacia la localidad de Tui, que marca el comienzo del camino portugués.
Tui cuenta con un casco histórico impresionante, abrumador. Ya desde la carretera se ve la fortaleza en la que destaca su imponente catedral.
Todo el municipio está repleto de pequeñas calles de piedra realmente bonitas y pintorescas, por lo que merece la pena visitarlo con calma.
Valença do Minho
Valença do Minho, como una hermana que ha cruzado el río es nuestro próximo destino. Pasamos por el Puente Internacional de Tui, curioso donde los haya, cuya obra acabó en 1885.
Resulta muy interesante ver el triple uso del puente ya que por arriba pasa el ferrocarril, por el interior de la parte baja circulan los coches y a los lados los peatones.
El casco histórico de Valença está perfectamente protegido por un sistema de murallas, puertas y baluartes que la hicieron casi inexpugnable.
Ahora bien, su interior es todo paz y armonía. Qué magnífico contraste!!!
Día 8 Islas Cíes
Qué mejor lugar para pasar un día de playa que el las paradisíacas Islas Cíes.
Importante: el aforo es limitado para preservar el ecosistema y protegerlo de la especie humana. Es imprescindible reservar la visita aquí y en un breve espacio de tiempo, con un localizador deberemos realizar una reserva con alguna de las navieras oficiales que ofrecen los servicios de transporte. Nosotros elegimos Cruceros RiasBaixas y todo fue perfecto. Os recomendamos ir con tiempo y aparcar en el parking del Centro Comercial A laxe, en el puerto de Vigo, a un par de minutos andando de las taquillas y el embarcadero.
Después de un trayecto de unos 40 minutos desembarcamos en las Islas Cíes y nada más llegar ya podemos deleitarnos con la maravillosa estampa de la Praia de Rodas, considerada como una de las mejores del mundo. El paraíso en la tierra.
Pero no todo en Cíes es sol y playa. Podemos realizar hasta 4 rutas de senderismo. Nosotros optamos por la ruta del Faro de Cíes que es preciosa por las vistas pero no la recomendamos para menores de 10 años sobre todo si hace calor. Se nos hizo un poco larga.
Ya de vuelta de la caminata, a disfrutar de la playa: blanquísima y fina arena y aguas absolutamente cristalinas a las que les faltan unos grados de temperatura para ser perfectas.
Las Islas Cíes son uno de los mayores tesoros de la ría de Vigo y de Galicia. El Parque Nacional Marítimo-Terrestre es uno de los lugares más hermosos de España, los romanos les pusieron el nombre de las Islas de los Dioses.
Día 9 Combarro, Pontevedra y playas
Ultimo día de viaje. Dejamos para el final dos joyas como son Combarro y Pontevedra.
Combarro
Combarro presume de ser uno de los pueblos más bonitos de Galicia y de España por su peculiaridad. Se trata de un pequeño pueblo marinero con un conjunto histórico de hórreos y cruceiros totalmente espectacular y sorprendente.
Su casco antiguo es encantador, eso si repleto de turistas que le restan parte de su belleza.
Combarro cuenta con 60 hórreos de los cuales 30 se asoman al mar, lo que le da un enfoque único de una belleza que se queda grabada en la mente.
Tan característicos y gallegos como los hórreos son los cruceiros de piedra y granito que también abundan en Combarro. Los cruceiros son habituales en los pueblos celtas como Bretaña, Irlanda y también en Galicia. Parece ser que protegían los cruces de caminos donde se creía que se realizaban reuniones de meigas, convirtiéndose en lugares seguros.
En definitiva, un paseo por Combarro gusta a pequeños y mayores. No podéis obviar esta visita.
Muy cerca de Combarro se encuentra Pontevedra. Imprescindible.
Pontevedra
En Pontevedra todo está a un paso. Y hay tanto que ver…Parques, alamedas, paseos por el río en plena ciudad y un centro histórico que después del de Santiago, es el más importante de Galicia. Iglesias, plazas porticadas…en cualquier momento parece que se nos va a aparecer un caballero de la Edad Media.
Este viaje a Galicia en familia (numerosa) ha sido todo un éxito. Tantas veces postergado, nos ha hecho reflexionar sobre los tesoros que tenemos tan cerca, y que muchas veces desconocemos o infravaloramos. Todo lo extranjero nos parece mejor y no es así en la mayoría de los casos. Nuestro problema es que nos vendemos mal, no creemos en el patrimonio que tenemos. Este año va a suponer una curva de inflexión en ese sentido. Esperemos que así sea y vivamos una nueva moda de viajar por España, no empujados por una desgracia si no por el placer de conocer nuestro país.